El técnico argentino destacó el trabajo en equipo, la intensidad en los entrenamientos y la unión entre los jugadores, aspectos que fueron clave en un año lleno de éxitos para el Cacique.
El 2024 fue un año inolvidable para Colo-Colo. Bajo el mando de Jorge Almirón, el equipo no solo se coronó campeón del Campeonato Nacional y la Supercopa, sino que también logró una destacada actuación en la Copa Libertadores, llegando a los cuartos de final tras una prolongada ausencia en esa instancia. Estos logros marcaron el inicio de una nueva era de esperanza para los hinchas colocolinos.
El arribo del técnico argentino revolucionó al club desde el principio. Su liderazgo, sumado al fichaje de Arturo Vidal, generó entusiasmo tanto en Chile como a nivel internacional. Almirón, conocido por su estilo de juego dinámico y enfoque táctico, logró sacar lo mejor de un plantel que enfrentó grandes desafíos, especialmente en la primera parte del torneo, cuando se encontraba lejos de los primeros lugares de la tabla.

El cambio comenzó a gestarse con un fuerte enfoque en la unión del grupo. Según Almirón, la libertad que brinda a sus jugadores y la confianza en los líderes del equipo han sido pilares de su estrategia. “Los más grandes enseñan a los más jóvenes. Al inicio fui más exigente, pero ahora trabajan con mucha intensidad y con un compromiso admirable”, señaló el entrenador en una reciente entrevista con La Arenga del Abuelo.
El impacto de su cercanía con los jugadores jóvenes también ha sido crucial. “Me llevo muy bien con los chicos, siempre están atentos a los grandes y al entrenador. Esa dinámica de aprendizaje y camaradería ha sido clave”, expresó. Con estos valores, Colo Colo se prepara para afrontar nuevos desafíos en 2025, con la ilusión de seguir cosechando triunfos tanto a nivel nacional como internacional.